Desde las alturas por un mundo mejor.

La Escuela Móvil del Agua contribuye a ayudar a que la personas de los países en vía de desarrollo aprendan técnicas sencillas que les permitan tener acceso al agua y al saneamiento por si mismas. El uso de materiales locales y la implicación de las familias en su construcción permite su conservación. Asimismo, el bajo coste permite a las personan que han aprendido estas técnicas convertirse en profesionales del agua y poder ofrecer a sus vecinos acceso al agua a un precio asequible, con lo que se cumple una doble función. Por una parte la creación de empleo en zonas desfavorecidas y por otra la mejora de las condiciones vida, salud y nutrición.

© Foto: Laura Díez García